En las culturas cristianas, la oveja se compara con el Cordero de Dios (Agnus Dei) y simboliza un ser bueno y obediente. Por eso, a veces se usa metafóricamente para elogiar a alguien amable y puro.

Por otro lado, debido a su naturaleza gregaria, a veces puede referirse a personas que siguen a otras sin tener opiniones propias. Al igual que la expresión inglesa "sheeple" (sheep+people), puede expresar tanto una pureza positiva como un conformismo ciego negativo, por lo que el contexto es crucial para este emoji.